PERSEVERE

 

La Biblia dice en san Mateo 24:13: “Aquel que persevere hasta el fin será Salvo”

Todo lo que usted quiera conquistar en esta vida precisa de dos cosas: Sacrificio y perseverancia. Sea para terminar los estudios, para construir una casa, para montar un negocio, para ahorrar y viajar, o  para hacer una dieta, etc.  Si no hay sacrificio y perseverancia usted se quedara sin recompensa, se quedara a mitad de camino convirtiéndose en una persona mediocre. Hay personas con mucha inteligencia y capacidad pero que no logran triunfar porque les falta sacrificio y perseverancia. Otras tienen buenas ideas pero no llegan a nada, porque no invierten su vida en aquello que desean o sueñan. Lo que hace la diferencia entre una persona que conquista y una persona que no, está en el sacrificio y la perseverancia!.  Las cosas no ocurren por arte de magia, hay que provocarlas, tampoco existe el éxito de la noche a la mañana! Es un proceso, un  camino de sacrificios, renuncias y abnegación.

Lo mismo es en el camino de Dios. Para ser salvos y llegar al cielo hay que perseverar en la fe. Infelizmente muchas personas creen que van a ser salvas porque un día se bautizaron, o creyeron, o hicieron la oración de entrega, o participaron un tiempo de las reuniones de la iglesia, pero la realidad es que si hoy no están perseverando todo el esfuerzo anterior fue en vano, porque la salvación no es por lo que hice en mi pasado sino por la condición actual de mi corazón! A Dios no le interesa su pasado, Dios mira su condición actual. Ejemplo de ello tenemos en la parábola de las 10 vírgenes. Todas ellas en su pasado eran santas, todas tuvieron lámparas y aceite en ellas, todas esperaban la venida del novio, pero a la medianoche cuando el novio por fin llego, no todas estaban perseverando en la fe, no todas estaban en condiciones de ser aceptadas! Me comprende? Usted no puede vivir del pasado, usted no podrá justificarse diciendo que antes servía, antes oraba, antes congregaba, antes tenía una entrega total, no! La salvación es algo que yo tengo que cuidar todos los días, mas aun viendo que el día del Señor se acerca!

Jesús triunfo porque el sacrifico y persevero, el no se rindió; y aun estando en la más profunda agonía hizo la voluntad del Padre. El no tuvo intervalos, ni justificaciones para desistir, el fue sacrificado y obediente y recibió toda potestad.

Lamentablemente hoy hay personas para quienes su salvación, entrega y servicio son cosa del pasado, no están perseverando. Pero lo más peligroso es que creen que esto no les va a traer consecuencias. Hebreos 2:3 dice: “¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron”

 

Quiere usted ser salvo? Cuide su salvación! Persevere haciendo la voluntad de Dios y estando firme en su camino. Recuerde que Jesús enseño “Aquel que persevere hasta el fin ese será salvo”