LA LLAVE LLAMADA HUMILDAD




En la entrega anterior hablaba sobre la importancia de encontrar la llave correcta para abrir la puerta cerrada que enfrentamos. Cada puerta tiene su llave, cada corazón también! incluso las oportunidades llegan cuando usamos las llaves correctas. La "llave" es una estrategia, una forma, una actitud, una palabra que tiene el poder de destrabar lo trabado, de abrir lo cerrado.

Hoy quiero poner énfasis sobre una de estas tantas llaves: La Humildad.

La Escritura Sagrada dice que Dios resiste al soberbio, pero da gracia a los humildes (Santiago 4:6). Es decir, que quienes se mantienen humildes delante de Dios pero también delante de sus semejantes, hallan el favor y puertas abiertas. Hay quienes por el contrario exhiben orgullo, altanería, pedantería, narcisismo, se sienten superiores a los demás y generan el rechazo y la antipatía de quienes le rodean.

Siempre es mejor mantenerse humilde, aun cuando uno tenga de que jactarse. Siempre es mejor estimar al otro como superior a uno mismo (Filipenses 2:3-4)

Mientras la soberbia cierra corazones, la humildad los abre. Quien use la llave de la humildad siempre conseguirá una segunda oportunidad. 

Hay personas que son muy capaces y poseen cualidades y talentos pero son traicionados por su carácter, les cuesta reconocer sus limitaciones, pedir perdón, escuchar con atención a los otros, dejar de alagarse a si mismos para reconocer las virtudes de los demás, y por su carácter orgullo, repelen a las personas y las oportunidades. 

Por eso la Escritura dice "El que se enaltece sera humillado, mas el que se humilla ese sera enaltecido" (Mateo 23:12)

Jesús utilizo en una oportunidad una parábola para describir el alcance de esta virtud: La parábola del Fariseo y el publicano (Lucas 18:9-14). El fariseo, muy religioso y estudioso de la Ley Sagrada, se creía a si mismo, justo, perfecto, importante, destacado, por eso buscaba los primeros lugares en la sinagoga y oraba consigo mismo palabras en voz fuerte para llamar la atención de los oyentes haciendo gala de todas sus obras y virtudes. En cambio el publicano, cobrador de impuestos y mal visto en la sociedad por su empleo corrupto, se paro al fondo de todo y golpeándose el pecho decía "Señor, se propicio a mi que soy pecador" Jesús dijo que este publicano volvió a su casa justificado, no así el fariseo. Cual fue la diferencia entre ambos? La actitud! El publicano supo humillarse y por ende hallo gracia ante los ojos de Dios y le fueron perdonados sus pecados.

Quiere usted acceder al corazón de Dios? Use la llave de la humildad. dice su palabra "Un corazón contrito y humillado no despreciare yo" (Salmos 51:17)

Quiere usted llegar al corazón de su jefe, de su conjugue, de esa persona con la que hace tiempo esta distanciada? Use la llave de la Humildad. Muéstrese humilde, hable con humildad, baje la cabeza y Dios hará el resto.

Quiere usted que Dios le use en su obra? Considérese el servidor de todos, tenga espíritu de aprendiz, manténgase abierto a la corrección, obedezca, lave los pies de los demás, Sea humilde! y Dios le enaltecerá en publico!

Pruebe hoy usar la llave llamada humildad y compruebe como esa puerta cerrada se abrirá ante usted.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Y ANTES QUE LA LAMPARA FUESE APAGADA

LOS 10 PRINCIPALES CONSEJOS DE SALOMÓN PARA LOS JÓVENES

BUENAS DECISIONES