RENUNCIA

 

El primer paso para la grandeza es la renuncia. Para triunfar en el futuro hay que soltar el pasado. Para correr una carrera hay que despojarse de todo peso, para zarpar mar adentro es necesario abandonar el puerto de la seguridad. El triunfo exige renuncias, siempre habrá que soltar algo en pro de algo mejor. Habrá que renunciar a comodidades, horas de sueño, gastos innecesarios, formas de pensar, carácter e incluso hasta habrá que hacer cambios muy profundos como dejar atrás la tierra que nos vio nacer y la propia familia. Sin renuncia, sin sacrificio no hay victoria!

Cuando Dios pensó en bendecir a Abraham y hacer de el una nación grande, lo primero que le exigió fue, renuncia: “Sal de tu tierra y de tu parentela…”. Abraham tenía todo en Harán, tenía una vida armada, tenia familia, tenia bienes, pero Dios le pidió que dejara todo! Ahora bien, es fácil renunciar a lo poco, pero qué difícil es renunciar a lo mucho! Qué difícil es obedecer y renunciar cuando estas cómodo con tu vida! Eso fue lo que experimento Abraham. Pero cuando Dios te saca de lo bueno es porque te quiere llevar a lo excelente!

Si quieres la bendición de Abraham tendrás que usar la fe para desapegarte de aquellas cosas que te limitan. Abraham experimento tres clases de despego:

Apego sentimental: Hay gente que vive haciendo vínculos almaticos, emocionales, de amiguismo, pegote. Se cuentan todo, se secretean, comen juntos, se sientan juntos, van juntos a todos lados, se tiran flores por facebook,  hasta que pasa algo y se derrumba todo y de amarse se terminan odiando. Hay quienes se casan y a la semana ya están debajo de las polleras de la mama, o nunca salen del nido, o se van a alquilar al lado!, Están los que se fascinan con un pastor y le entregan el corazón al pastor en vez de a Dios. Están los que tienen que llevar a la familia a todos lados porque se sienten responsables por ellos, y no se permiten ser felices o servir al llamado de Dios, como le paso en principio al propio Abraham, que le costó dejar a su padre y a su sobrino.

Apego Material: Hay gente que vive para la plata; todo es plata, conocen a alguien y ya están pensando que le pueden sacar. Entran a un lugar miran todo y dicen “ Este tiene plata, mira la tele, mira el equipo de música, de donde saco todo esto? Conocen a alguien que está en una mejor condición económica Y le meten presión o lastima para que les ayude “eh!, vos me tenes que sembrar, vos ganas bien!” “A vos no te cuesta nada prestarme esa plata, no seas usurero, si a vos te va bien!” Gente que es obsesiva del auto, le podes tocar a la esposa pero no le toque el auto porque te matan! Hay gente que se apega a cargos, a status sociales y se desmoronan, se ponen locos cuando no los pueden mantener, hay gente que se va de las iglesias porque no le dieron un cargo…hay gente que estuvo acostumbrada a comer afuera todos los sábados y ahora que tienen que hacer ajuste lo padecen como una vergüenza. El joven rico quería heredar la vida eterna y fue desafiado por Jesús a vender todo lo que tenia, y no quiso porque su corazón no estaba con Jesús sino con la plata, el no quería soltar nada!. Abraham tuvo que dejar la tierra, los pozos de agua, lo construido atrás, a fin de caminar en obediencia a Dios. Nada trajimos y nada nos vamos a llevar de este mundo así que si queres que tu camino sea ligero, no te ates a nada material. Quien esté dispuesto a soltar, a renunciar,  a abrir la mano, siempre recibirá más!

Apego al pasado: Hay quienes viven en una eterna nostalgia, detenidos en el puerto del ayer, pensando que todo tiempo pasado fue mejor. Quienes viven mirando para atrás, no tienen futuro. La esposa de Lot, por causa de su apego al pasado y a su ciudad, quedo convertida en estatua de sal. Cuando Abraham salió de su tierra dejo atrás el pasado, las costumbres, la religión del lugar,  los ídolos del lugar. Si Abraham no soltaba el pasado estaba condenado a repetir el error de sus padres y eso, lo condenaría al fracaso. Hay gente que es apegada a la vieja religión, a la vieja iglesia, al santito, a las costumbres, eso te limita! Solta el pasado porque lo mejor está por venir!

 

Por que desarrollamos apego?

Siempre que hay apego es porque hay una carencia interna, un vacío y buscamos llenarlo. Algo nos falto en el pasado, un abrazo, amor, contención, condiciones, etc. y eso nos genera temor, pensamos que se va a repetir ese pasado, entonces el miedo nos limita a abrazar lo seguro y no nos deja ir detrás de la grandeza. Hoy Dios quiere llenarte de la fe de Abraham para que puedas soltar todo lo que tengas que soltar a fin de que el propósito de Dios se cumpla en tu vida!