EL GRAN CONFLICTO

 

Génesis 1:1 dice: “En el principio creó Dios los cielos y la tierra”. Aquí hay dos verdades centrales. Una que El universo tiene un origen y un principio, y segundo que Dios es quien creó todas las cosas. Cuando fue esta creación? La Biblia no lo dice! Hace Millones de años.

En esa creación Dios estableció nuestro planeta al que llamamos Tierra y su universo. El génesis sigue relatando de manera muy sencilla un periodo re organizativo de esa creación que por un motivo que ya veremos a continuación llego a quedar desordenada. Cada uno de esos días del génesis no son días de 24 horas sino un tiempo, un periodo que engloba el proceso de reorganización. Lo último que fue establecido fue el hombre, que aparece en la etapa 6 o en la última etapa del trabajo de Dios.


Porque Dios creó a la humanidad?

Por amor. Por eso nos hizo a su imagen y semejanza. El hombre fue creado para gozar de dicha, felicidad, bienestar, salud, vida eterna y sobre todo de plena comunión con su Creador. De hecho, antes del pecado y la caída del hombre, Dios camina y se paseaba en el huerto hablando con su creación, el hombre. Dios creó este planeta como hogar del hombre y la mujer. La tierra era un paraíso. Si hoy admiramos la su belleza imagínense cuanto más lo era antes del pecado que no solo afecto al ser humano, sino que trajo maldición y deterioro sobre nuestro mundo. Dios le dio la autoridad al ser humano de gobernar, cuidar y fructificar la tierra, incluso sometió todas las cosas bajo su mano. Dios había establecido al hombre como administrador de la tierra.


Quien fue el causante de todo este daño?

Satanás. El opositor, el enemigo, el engañador. El ya estaba sobre la tierra antes que Adán y Eva. De hecho el se presenta como una serpiente tentadora en el huerto a fin de inducir al hombre a desobedecer a su Creador. Dios había establecido un límite, una instrucción que el hombre debía obedecer para su propio bien y para no perder su estado de pureza. Adán y Eva desobedecieron escuchando a la serpiente y tomando el fruto prohibido. Ese pecado o transgresión contra las leyes de Dios acarreo consecuencias (todo pecado acarrea consecuencias!) El hombre perdió todos sus beneficios, porque el pecado trae muerte y maldición. Más Dios no desamparo a sus criaturas. Dios cubrió la desnudez del hombre y la mujer sacrificando un animal para ello. Esto era figura del plan que Dios ya tenía en mente: Dar a su propio Hijo Jesús para cubrir con su sacrificio y su sangre nuestros pecados y así saldar la deuda para con Dios por causa de nuestra desobediencia.


Porque Satanás estaba en la Tierra?

La Biblia nos cuenta que antes que al hombre Dios creó a las criaturas celestiales, entre ellas los ángeles y potestades espirituales superiores a los ángeles como ser querubines, serafines, principados, tronos, etc. Estos seres están al servicio de Dios como mensajeros y custodios de su creación. Entre estos seres se encontraba uno sobresaliente por su grandeza y conocimiento: Lucifer (“el portador de luz”, el más brillante). Este un día fue echado del cielo. ¿Por qué cayó Satanás del cielo? Satanás cayó por su orgullo. Él deseaba ser Dios, no un siervo de Dios. Isaías 14:12-15. Ezequiel 28:12-15 describe a Satanás como un ángel increíblemente hermoso. Parece ser que Satanás era el más alto de los ángeles, el querubín ungido, la más hermosa de todas las creaciones de Dios, pero él no estuvo contento con su posición. Satanás deseaba ser Dios, para esencialmente quitar a Dios de su trono y tomar el control del universo. Lucifer, este querubín fuerte en rango y poder, aparentemente tenía a su cuidado nuestra creación, es decir la de nuestro universo y la vida humana. Como lo sabemos? La Biblia dice que él es el príncipe de este mundo, no el rey pero si el príncipe, alguien a quien en calidad de hijo le fue asignado un principado. En la tentación él le ofreció a Jesús todos los reinos de la Tierra porque según el mismo “le fueron dados”. En el capítulo 1 del libro Job, Satanás se presenta a una reunión de los hijos de Dios, es decir de los seres angelicales al cuidado de la creación. Dios le pregunta de dónde vienes? Satán contesta: “De rodear la tierra y andar por ella”. Se presenta como quien está cumpliendo su misión asignada desde un principio.


Usted dirá pero el ya no es Lucifer, el ya no es ese querubín obediente a Dios, ahora es enemigo de Dios, no debería estar aquí en la tierra. El es un usurpador, opositor y destructor, el no solo no se va a humillar, ni se va a ir sino que en su orgullo está dispuesto a todo, incluso a destruir la corona de la creación de Dios que es el hombre y la mujer. Su razonamiento es: Primero, este lugar me fue asignado, segundo, Dios puso al hombre como administrador pero fracasó
, tercero, yo voy a dar batalla hasta el final por el control del universo.


AHORA MISMO NOS ENCONTRAMOS EN UNA BATALLA ENTRE EL BIEN Y EL MAL.

Satanás fue expulsado del Cielo, Dios ya decreto su final, pero él se resiste y se aferra a su mejor carta “la humanidad”. El busca poner a la raza humana también contra Dios, que esta se pierda sin Dios. Al llevar al hombre a la perdición, alejándolos de Dios Satanás busca ganar la pulseada entre el bien y el mal. Satanás procura demostrarle a Dios que su creación fue un fracaso, que fallo y que la humanidad lo prefiere a Él. Pero cuando Dios mando a su Hijo Jesús a salvar a la humanidad en la cruz, hirió a Satanás de muerte. Este intento de muchas maneras impedir que Jesús lograra su misión. Pero cuando Jesús murió y resucito abriendo así un camino directo al cielo, Satanás supo que ya estaba derrotado. Él lo sabe! Y sabe que le queda poco tiempo, por eso se ha levantado con furia contra la humanidad y en especial contra los hijos de Dios, los que hacemos su voluntad. Todos los males y sufrimientos de la humanidad tienen que ver con esto con el empeño de Satanás de resistirse y hacer el mayor daño posible.


El plan de Satanás: Destruir a la humanidad, arruinar la creación de Dios y tomar el control del universo.

El plan de Dios: Restaurar al hombre a su condición original por amor y restaurar también el planeta y todo nuestro universo.


Lo que hoy estamos viviendo es el tiempo final, la batalla final, que pronto va a llegar a su punto más álgido y terrible. Pero el final de esta película ya está escrito. Vendrán juicios sobre Satanás y sus seguidores, los enemigos de Dios serán destruidos y nosotros sus hijos seremos establecidos nuevamente en un paraíso y todo volverá como al principio:

Gozaremos de vida eterna, salud y bienestar y estaremos en la presencia de nuestro creador y Padre celestial para siempre, mientras que Satanás, sus ángeles y sus seguidores terrenales serán confinados al infierno para siempre, ya que ese lugar fue preparado para ellos, como lugar de castigo eterno.