COMO CONQUISTAR LO QUE DESEAS

 

-Solta el pasado y las tristezas: Moisés había muerto. Aquello había sido un golpe muy duro para el pueblo pero también para Josué que era como un hijo, su mano derecha, el que iba con Moisés a todos lados. Para ellos Moisés era como la encarnación de Dios. Lo veían a él y se quedaban tranquilos. Pero ahora en el umbral de la tierra prometida Dios decide llevar a su presencia a Moisés y el pueblo se queda llorando la perdida y no un día ni dos sino varios días al punto que Dios tuvo que intervenir y exhortar a Josué diciendo: “Levántate ahora y pasa este Jordán.”. Ellos estaban detenidos en el pasado, paralizados por la tristeza, pero los planes de Dios debían cumplirse. Hay gente que tiene destino y propósito, tienen una promesa, una palabra, pero están anclados al pasado, no pueden soltar el dolor, la perdida, no pueden perdonar, no pueden sacudirse y seguir. Tu pasado es pasado, no te quedes llorando del lado incorrecto del Jordán, crúzalo! Sal del dolor, de ese recuerdo triste, de la melancolía, deja que las malas experiencias y las tristezas se queden del otro lado del Jordán, tu cruza y sigue adelante porque hay promesa de bendición para tu vida!

-Desecha la inseguridad: Esta era la primera batalla de Josué como líder y sucesor de Moisés. Moisés había dejado la vara muy alta. Todo el mundo infelizmente lo compararía. Y si no le iba bien? Como reaccionaria el pueblo? Obviamente esta posibilidad daba vueltas en la cabeza de Josué, era su bautismo de Fuego! Para colmo le toca como debut el partido más difícil, la ciudad más amuralla, “Jericó la invencible”, puertas muy cerradas, una fortaleza inexpugnable. Todo aquello de seguro daba vueltas en la cabeza de Josué generando temor e inseguridad. Lo mismo nos pasa a nosotros en este tiempo…”Yo quiero, pero…” ese pero está marcando tu inseguridad y es esa inseguridad la que te hace perdedor antes de sacar la espada.  “Yo quiero comprar el auto, pero si no me alcanza?” “Quiero empezar a construir mi casa pero está todo muy caro!” “Quiero tener una familia, pero no sé si casarme…” Los peros y pretextos son la señal más clara de tu inseguridad, y la inseguridad es la que te paraliza, te tira para atrás, te hace débil, no que no puedas lograrlo, no que no seas capaz, es que la inseguridad, la falta de confianza te hace ver el vaso medio vacío y por ende no salir con la actitud correcta al campo de batalla. Por esto fue que Dios le dijo a Josué: “Mira yo he entregado a Jericó en tu mano…” Porque Dios sabia que Josué se sentía inseguro, por eso le dio una palabra certera para sacar de su corazón todo temor!

-Marca tu territorio: Porque el Pueblo de Israel dio 7 vueltas alrededor de Jericó? Dijimos días atrás porque en el proceso, en la “elaboración” del milagro Dios tiene un valor agregado y enseñanzas que pasarnos. Pero como veían los cananeos esa marcha del pueblo de Dios alrededor de su ciudad?  Como un ejército que está marcando el territorio! En cada vuelta Israel estaba marcando el territorio, estaba declarando proféticamente, este lugar va a ser nuestro, ya lo caminamos, ya lo conocemos, ya lo determinamos, con cada vuelta ellos estaban tomando posesión hasta que finalmente Dios se los entrego!. Marca tu territorio! Anda una y otra vez al terreno que queres comprar, toma posesión, anda una y otra y otra vez a esa agencia de autos, camina por el fondo de tu casa y medí una y otra vez dónde y cómo vas a hacer la ampliación…tenes que pisar con la planta de tu pie el lugar que queres que sea tuyo!

-Grita tu fe: Al 7 día, y detrás de dar siete vueltas ese solo día, ellos gritaron con todas sus fuerzas, no era un grito de derrota, de lamento, de dolor, era un grito de conquista, de fe!. Las cosas se conquistan por la fe! Tenes que hablar fe, confesar fe y gritar la fe porque cuando tu gritas fe alejas al enemigo. Sabes porque el león ruge! Porque el marca su territorio, entonces a lo lejos otros animales escuchan y no se meten, porque el león rugió y marco territorio. Grita tu fe para que caigan las barreras, las murallas de duda, inseguridad, temor. Gritar tu fe trae certeza!