BAJO LA ALFOMBRA (CAMPAÑA DE JERICO)

 

-Te has preguntado porque a veces los resultados no son los esperados?

-Te has preguntado alguna vez, porque hay momentos en tu vida en que hasta lo sencillo se vuelve complicado y todo te cuesta más de la cuenta?,

-Te has preguntado porque hay temporadas donde no tienes fuerzas siquiera para mantenerte en pie?

-Sentiste alguna vez el golpe emocional que produce el dar por descontado que mereces tal o cual cosa y luego te desilusionas cuando el resultado es diferente?

-Cualquiera se sentiría desconcertado ante los malos resultados, más aun, cuando das por hecho que eres merecedor de la victoria.

 

Esta fue la controversia que experimento Josué.  Ya estaban del otro lado del Jordán, ya estaban en la tierra prometida, ya estaba empezando a disfrutar en vivo y en directo de todo lo que Dios les había anunciado por años que les habría de dar. Habían salido victoriosos de la principal de las batallas: Jericó. Aquello representaba un envión anímico muy importante, no solo porque fue la primer batalla en tierra prometida, sino porque habían visto como Dios les entrego una victoria sobrenatural sobre enemigos muy fuertes y poderosos que vivían amurallados y con un sistema de defensa infranqueable. Sin embargo Josué y los hijos de Dios vieron como activando la estrategia de Dios y bajo su guía, Dios les entrego a Jericó, su rey y su gente. Que podía fallar de allí en adelante? Si lo mas difícil ya había sido logrado?.  Ahora por delante estaba Hai, una ciudadela menor, de poco más de 12.000 habitantes sin demasiado poder de resistencia. Josué, confiado en su victoria anterior, no consulto a Dios, y dispuso no enviar a todos sus hombres, sino solo a 3000 de ellos. Pensó que eran suficientes, que aquello era solo “un trámite”: Aquel día aprendería una lección que jamás olvidaría: “Nunca dejes a Dios fuera de tus planes!” No dejes afuera a Dios de tu próximo paso, no salgas a tu próxima batalla sin asegurarte previamente de su presencia y consejo, no importa lo simple que te parezca la situación. Aquel día no solo fueron vencidos sino también humillados. Pero, que fue lo que paso? Como pudo fallar? Josué subestimo la situación. A veces nuestro peor enemigo es nuestra victoria anterior, porque nos hace creer que ya no necesitamos de Dios, ni de su guía y dirección. Frente a Jericó Josué escucho e hizo tal y cual Dios le indico, pero contra Hai, se relajo y no solo no consulto a Dios sino que se confió en sí mismo.

Cuantos hay que piensan que a Dios hay que invitarlo a determinados momentos de la vida, los complicados, los difíciles (esos sí que nos mantienen hambrientos de su presencia!) en cambio cuando atravesamos determinada bonanza, prosperidad o buena racha, no es necesario “contar con Dios” el puede esperar afuera hasta nuestra próxima crisis!.

Si lograste cosechar victorias es porque Dios te ha acompañado y te ha dado la estrategia, no ha sido tu capacidad o fuerza, sino el a través de ti. Dios quiere acompañarte en Jericó y también en Hai. Hay quienes buscan a Dios en la noche más oscura (y está bien) pero no lo consultan a la hora de ponerse de novios, o de invertir tal dinero, porque piensan que pueden lidiar solos con eso y que no es necesario que Dios intervenga. Pero luego lo que parecía menor se convierte en un gran dolor de cabeza y en tú peor pesadilla. Aprendamos a depender de Dios y de su guía en todo momento!

 

LO SEGUNDO QUE HIZO QUE LO FACIL SE CONVIRTIERA EN DIFICIL FUE LO ESCONDIDO DEBAJO DE LA ALFOMBRA…

 

2-Cierto líder llamado Acan, tenía cosas escondidas debajo de la alfombra: esta frase tan famosa fue acuñada como refrán para referirse a cosas escondidas, cosas que ponemos al oculto de los ojos de los demás, cosas que no queremos que se sepan. Acan había desobedecido a Dios en cuanto a su orden de no tomar nada de Jericó. No solo se tentó y desobedeció sino que supo mantener su mentira, escondiendo debajo de su alfombra aquel lingote de oro y un manto, pensando que nadie se enteraría y que nada iba a pasar.

Muchos al igual que Acan, guardan secretos, esconden detalles de su vida, ocultan debilidades, con el fin de mantener una imagen fuerte y de perfección delante de los demás. Lo malo lo ponen debajo de la alfombra para luego salir  a la calle, a mostrar una vida perfecta.

Las redes sociales están llenas de gente que vende una vida perfecta y feliz, mientras la mugre esta debajo de la alfombra.

Las iglesias están llenas de religiosos que aparentan santidad pero que esconden cosas debajo de la alfombra. Religiosos que se consideran mejores que los demás y con derecho a señalar la vida de otros, sin exponer sus propias miserias.

Dios no tiene problemas con nuestras debilidades, con nuestros conflictos emocionales, pero si con nuestros silencios. El problema no es la debilidad, la desobediencia, el problema es callarlo, ocultarlo, camuflarlo. Podemos equivocarnos y reaccionar a tiempo que Dios extenderá su  gracia, pero si decidimos, por lo que sea,  por hipocresía, por el que dirán, por conveniencia, por imagen, ocultar y callar estaremos atando las manos de Dios. Cuando Adán  fallo Dios descendió a buscarlo y que hizo Adán? se escondió! Cuando Pedro le falló a Jesús y no cumplió su promesa de seguirlo hasta la muerte, que hizo?: Se escondió detrás de las redes de su vieja vida!. No es necesario que sigas en el error de Acan y que las cosas terminen de la peor manera,  Su gracias hoy bajo a buscarte para darte una nueva oportunidad!. Tienes que entender que…

Los secretos duelen

Lo escondido frena la unción y el propósito de Dios en tu vida.

El pecado te hace débil, te priva de tus victorias.

Lo que escondes te esclaviza,  dejas de ser el mismo.

Salpica a quienes te rodean. Nuestros errores perjudican a quienes están con nosotros.

No cometas el pecado del silencio, no escondas aquello que esta mal, no dejes que una tonta debilidad te deje fuera del campamento, de tu salvación de tu ministerio, de lo que Dios tiene para ti. Si Acan hubiese confesado a tiempo la misericordia de Dios hubiese llegado.

Mantén tu corazón sano y saca de debajo de la alfombra todo lo que frena la unción de Dios en ti. Ten presente a Dios en todos tus asuntos y no des un solo paso sin tenerlo en cuenta como tu guía y te aseguro que aun la noche mas oscura te será clara como la luz del mediodía!