REPARA LAS GRIETAS

 


2 Reyes 12:6:8

Joas encuentra que el templo de Jerusalén se estaba deteriorando. Había grietas en el templo. Aquello más que un descuido era una falta de honra a Dios. El abandono no permite la manifestación de Dios. Con el templo arruinado no abría manifestación de Dios. El rey da la orden a los sacerdotes que junten ofrendas y arreglen las grietas. Pero pasaron los meses y los años y las grietas no se habían reparado. Entonces Joas dijo: Basta de estar así!, es tiempo de restaurar el templo!

El templo simboliza tu vida, tu corazón, tu matrimonio, tu hogar.

Las grietas representan aquellas cosas que están mal, pero que a menudo no le damos importancia porque las consideramos pequeñas, insignificantes, creemos que no afectan nuestro diario vivir, pero que justamente por ese descuido terminan ocasionando destrucción.

Una grieta en el techo de tu casa, ha de convertirse en un dolor de cabeza en el día de la tormenta.

Una grieta en la pared, si no la reparas, se irá abriendo cada vez mas hasta causar perdida.

Imagínate una grieta en un dique… o en la línea de flotación de un barco,  Por pequeña que sea esta anunciando una inminente perdida y destrucción.

Si hay grietas en tu vida repáralas!.  Ese pequeño enojo, ese resentimiento, esa desconfianza, esa disconformidad, eso que te irrita del otro y no lo hablas, no lo enfrentas, eso que te aleja de Dios, esas diferencias que tienes con la familia y que las dejas pasar…todas esas grietas que hoy te parecen menores, mañana pueden convertirse en tu dolor de cabeza.

Todos conocemos gente que se enojo y tú no tienes la menor idea de porque, o gente que comenzó con un vaso de alcohol en un cumpleaños y termino perdiendo la familia. Hay que tomar las cosas a tiempo, repararlas mientras hay solución.

Los sacerdotes del templo, no daban importancia y dilataban la reparación, seguramente porque veían que el templo seguía de pie y todo seguía igual. Hay gente que dice mi vida sin Dios sigue igual, sin ir a la iglesia todo sigue igual, sin cumplir mis promesas todo sigue igual, no estoy orando y todo sigue igual, pero lo que no se dan cuenta es que la presencia de Dios se alejo de ellos, y que aunque todo en apariencia está “bien” y sigue igual, la grieta se sigue abriendo y cuando quieran repararla va a ser tarde.

Las grietas son como las heridas del alma no se cierran a menos que trates con ellas, ignorarlas solo agravara tu condición. No postergues, no minimices el problema, busca la solución mientras estas a tiempo.

Algo no está bueno en tu matrimonio?…repara!

Algo dentro tuyo está cambiando y ya no sientes como antes la necesidad de Dios?…repara!

Estas mirando con recelo a tu hermano?…Repara!

Hay cosas en tu carácter que tienes que cambiar?...no te tardes!

Hay pecados que te están separando de Dios? No te acostumbres a ellos! Repara!

Tu casa es un fiel reflejo de tu condición espiritual, cuando algo está mal, hay gritas, humedad, goteras, cosas rotas al principio nos disgustamos y decimos que vamos a hacer algo urgente pero no hacemos nada, pasa el tiempo y nos acostumbramos, vemos la grieta, la humedad, pero no sentimos lo mismo que al principio y por ultimo convivimos con la grietas, ya son parte del decorado, del paisaje. No te acostumbres a las grietas, no pierdas la presencia de Dios en tu vida u hogar por abandono, invierte en reparar todo aquello que daño tu templo.

 

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