IMPREVISTOS

 

Todos hacemos planes para que nos vaya bien, para que no nos falte nada pero a menudo surgen imprevistos, situaciones que están fuera de nuestro control y que hacen que nuestros planes se trunquen o al menos se dilaten en el tiempo.

Esto fue lo que paso en las bodas de Cana de Galilea donde estaba Jesús, su madre María y sus discípulos amen de los contrayentes y todos los invitados. Todo iba bien hasta que a mitad de boda hubo un contratiempo. Se quedaron sin vino. Que había pasado? Vinieron más personas de las calculadas? Bebieron de mas?, hacia demasiado calor? No lo sabemos, pero lo que si sabemos es que aquel imprevisto les estaba causando mucha preocupación. Seguramente los novios y sus familias habían planificado meticulosamente la boda con tiempo, de hecho tenían mozos y maestresala (jefe de mozos) para administrar los recursos de la boda. Pero algo fallo y con ese contratiempo apareció el desespero. Nadie se había dado cuenta pero María, la madre de Jesús, que seguro tenía algún tipo de parentesco con los novios pudo ver en ellos sus rostros de preocupación. Sabiendo que Jesús tenía el poder de transformar aquella situación incómoda en algo hermoso, sabiendo que tenía el poder de hacer un milagro, acudió a Jesús y le pidió que interviniera, que hiciera algo. El resto de la historia es bien conocida por todos nosotros, Jesús mando a llenar seis tinajas con agua y milagrosamente por su intervención el agua se convirtió en vino, y del mejor! Todos bebieron gustosos, se alegraron y la fiesta fue todo un éxito.

Siempre que aparezca un imprevisto, siempre que algo te falte, que algo se salga de control, permite que Jesús intervenga. Haz como María, búscalo a él, habla con él, insiste con fe hasta que veas y disfrutes un milagro. Aquel que transformo el agua en vino también puede cambiar tu problema en una maravillosa bendición! Adelante!