DIEZMO, OFRENDA Y VOTO

Que es el Diezmo?

“Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.” (Malaquias 3:10)



Es un acto de sumisión y obediencia a Dios que permite, al que lo cumple, reclamarle a Dios la bendición de los cielos abiertos. En ninguna otra parte de la Biblia Dios permite que se le pruebe, solamente en Malaquías 3:10. El diezmo debe ser dado con exactitud matemática, para no “robarle a Dios” y es lo primero que se debe apartar cuando el dinero llega a nuestra mano. El diezmo es el 10% de toda bendición económica y no solo del trabajo convencional. Hay quienes venden una propiedad o hacen un negocio extra y no diezman, una, porque les parece mucho y otra porque creen que ya lo están dando del trabajo. La Biblia enseña claramente que se debe diezmar de todo lo que pase por nuestra mano.



Que es la ofrenda?

“Pero esto digo: El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra generosamente, generosamente también segará. Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre. Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra” (2º Corintios 9:6-8)


Al ofrendar cada uno da como propuso en su corazón. Es decir, la ofrenda muestra lo que hay en el corazón de la persona. Quien mucho ama, mucho da, quien no ama no da, es así de simple. Dios a través de la ofrenda prueba lo que hay en nuestro corazón. Mi ofrenda determina mi amor por Dios, mi amor por Dios determina como va a ser mi relación con el y de esa relación se desprende mi beneficio. Mientras que el diezmo muestra mi obediencia y sumisión al Creador, mi ofrenda muestra mi amor por él. Pablo enseña que la ofrenda es proporcional a las bendiciones cotidianas, pero también habla de dar con generosidad para recoger con abundancia. Esto significa que en muchas ocasiones Dios esperara de nosotros que demos ofrendas mas allá de lo proporcional a mi ganancia, en esto se aplica la generosidad en dar más de lo que debo. Y no podemos cerrar este capítulo sin mencionar a la viuda que echo su moneda que era todo en el plato de las ofrendas, ella fue justificada y bendecida por Jesús.



Que es el voto?

“Cuando a Dios haces promesa, no tardes en cumplirla; porque él no se complace en los insensatos. Cumple lo que prometes. Mejor es que no prometas, y no que prometas y no cumplas.” Eclesiastés 5:4-5

 

El voto es netamente un acto de Fe. El diezmo muestra sumisión, obediencia, la ofrenda amor y gratitud, pero el voto muestra la fe que la persona tiene en su Dios. El pueblo de Israel solía llevar al templo sus diezmos, primicias y ofrendas, pero en ocasiones especiales ya sea previo a una gran conquista, a un acercamiento mayor a Dios o para aplacar la ira de Dios, el pueblo presentaba Sacrificios. Estos consistían en darle a Dios algo muy especial e incluso poner todo lo de más valor en su mano. Solo la fe puede guiar a la persona a realizar este acto, pues solo a través de ella se puede creer que Dios ha de recompensar con un beneficio aun mayor. Abraham estuvo dispuesto a sacrificar a Isaac, lo mejor de su vida. David dijo: No daré sacrificio que nada me cueste y compró una propiedad para construir un Santuario, Una mujer quebró a los pies de Jesús un frasco de Alabastro que contenía Nardo puro, siendo el ahorro de toda su vida y así podríamos mencionar decenas de ejemplos más. Que tienen todos estos en común? Dieron lo mejor, dieron algo especial, por fuera de lo establecido por la ley y alcanzaron también algo especial de parte de Dios. El voto o sacrificio me tiene que costar, me tiene que doler, me tiene que dejar absolutamente dependiente de Dios. Muchos dicen: “es que me cuesta!” Claro! Te tiene que costar sino no es sacrificio! “Es que es todo lo que tengo” Eso es lo que Dios te está pidiendo!.