EL ESPÍRITU QUE ATACA A LAS FAMILIAS

 

Los demonios andan entre nosotros, no los vemos porque son espirituales. Ellos tienen como finalidad influenciar el comportamiento humano.

El demonio siempre se esconde, porque realiza su trabajo en las sombras en lo oculto. Y como es que se esconde? Haciéndole creer a las personas que lo que sienten o viven por errado que sea, es normal! Es normal el odio, el resentimiento, la lujuria, la mentira…

Los demonios tienen nombre y jerarquías, uno de ellos, un espíritu fuerte y principal se llama Asmodeo.

Asmodeo es mencionado en el libro apócrifo de Tobías. Cuenta la historia que mató a siete maridos de Sara y que fue encadenado en el desierto por San Rafael. Asmodeo se enamoro de Sara y por lo tanto cada vez que Sara contraía matrimonio mataba  al marido durante la noche de bodas. Hasta que Sara se compromete con el joven Tobías y este pide la ayuda a Dios quien le envía al arcángel Rafael. En el libro apócrifo llamado Testamento de Salomón se dice que Asmodeo conspira en hacer que los conyugues caigan en la lujuria e infidelidad.

Debemos entender que la batalla final entre el bien y el mal se está llevando dentro del seno de la familia. Satanás odia a la familia porque es la primera institución creada por Dios. Satanás no tiene familia, Dios y nosotros si.

Por eso todo lo que afecte a la familia, entre ellos el divorcio y la infidelidad son producidos por este demonio. Los divorcios son cada vez más frecuentes, los matrimonios duran cada vez menos, las relaciones familiares empeoran cada vez llegando al asesinato intra familiar, esto no es casual sino que es parte de un plan demoniaco.

 

La táctica

¿Cómo opera este espíritu? 

-Debilita la relación entre los esposos. Debilita la unión en la pareja entreteniéndolos con trabajo, amigos, hijos, etc.

-Separa la relación de los padres de los hijos. Padres ausentes. Padres que no pasan valores. Padres sin autoridad.

-Destruye la infancia. Una de las cosas más devastadoras para los niños es que los padres discutan frente a ellos. De esta manera hace que los hijos tengan que elegir entre uno u otro perdiendo su capacidad de amar a ambos por igual. Eso lleva a su vez a la desobediencia a uno u otro padre. Los niños heredan esa violencia y destrato y lo replican luego cuando son grandes no respetando al sexo opuesto o bien teniendo también matrimonios fallidos.

-Noviazgo de yugo desigual: Opera desde el noviazgo. Este demonio induce a que una persona que es espiritual se una a otra que es tibia espiritualmente, o bien una persona que directamente no le interesan las cosas de Dios. De esta manera produce una unión que no tendrá futuro. El que era espiritual dejara de serlo.

-Une a dos personas que tienen heridas emocionales sin sanar. Si una persona no puede manejar o no pudo resolver sus propias heridas menos podrá ayudar a su conyugue a resolver las suyas. A los demonios les encanta concentrarse en las heridas espirituales y en los sentimientos de dolor.

-Enojo: Ellos intentan que siempre digas algo enojado a tu conyugue para generar una herida en el y el nivel de ira vaya creciendo en el hogar 

-Desvirtuar los roles: Los demonios tratan de igualar los roles de los integrantes de la familia, en vez de enfatizar las habilidades únicas y diferentes que cada uno tiene. Es obvio que las mujeres tienen ciertas habilidades que el hombre no tiene, y viceversa, pero a través de la ideología de género busca igualar a ambos sexos (lo que parecería loable) para de esta manera reducir las capacidades innatas de cada uno.

-Llevan a los integrantes al egoísmo: Importa lo que yo quiero, lo que yo siento, lo que a mí me gusta, si vos no me das, si no me haces feliz, no te necesito, me voy, me busco otra, armo otra vida, rompo el pacto familiar. La biblia en cambio habla de morir a uno mismo, de pensar en el bien y la felicidad del otro, porque todo lo que das vuelve!

-Usan la influencia del entorno: Amigos, compañeros de trabajo, parientes incrédulos, y fundamentalmente medios de comunicación que están bajo el maligno, para que ese integrante de la familia deje de escuchar la voz de Dios y entre en duda y confusión.

 

Como vencer?

 

La lucha no es contra sangre y carne: Tu esposo no es tu enemigo, tu hijo no es tu enemigo, tu enemigo es espiritual, astuto y opera en las sombras. Debes orar por ese ser querido que presenta mal carácter o malas actitudes ya que esta bajo la influencia del maligno. No dejes de amar a quien te hace daño.

Atar y desatar: Jesús enseño que para entrar a una casa primero hay que atar y neutralizar al hombre fuerte. De la misma manera para entrar en el corazón de ese familiar primero hay que atar al espíritu fuerte que lo domine, llámese rencor, ira, orgullo, vicios, etc. Dios nos ha dado poder para atar y desatar en su nombre.

La armadura de Dios: Para vencer hay que estar revestido de toda la armadura de Dios, ya que la batalla no se libra con nuestras fuerzas o armas personales sino a través del blindaje del Espíritu de Dios. Sin los dones y frutos del espíritu santo, la batalla es desigual y no hay chances de triunfar.